CREMA INFANTIL PROBIÓTICA
La piel de los bebés es más vulnerable a infecciones e irritaciones, pierde agua con más facilidad dando lugar a una piel seca.
Su inmunidad aún no está desarrollada , así que debemos ayudarla a través de la piel, manteniendo una buena estructura.
Para ayudar recomendamos el uso diario de la Crema Infantil Probiótica después del baño para mantener la función barrera de la piel intacta.
Testado dermatológicamente.
Aplicar una o dos veces al día, con un suave masaje circular, sobre la piel seca o irritada.
Procurar utilizarla siempre después del baño.
Nutre y regenera la piel, la calma de irritaciones y la protege de agentes externos.
Aceite de Caléndula: antiinflamatorio y calmante.
Probióticos: ayudan a restablecer la microbiota de la piel y como consecuencia aumenta las defensas de esta.
Pentavitin: Mantiene en buen estado el estrato corneo aumentando la hidratación.
Boswellia: antiinflamatorio y calmante.
Aceites vegetales (Argán y Rosa Mosqueta): hidratan y acondicionan la piel aportándole suavidad y luminosidad.
Manteca de Karite: Nutre la piel. Su alto contenido en ácidos grasos y vitaminas antioxidantes que protegen la piel de factores externos.